Las mujeres según María Cher

Los cortos de moda y los libros o cuadernillos de estilo –léase look books– son la nueva estrategia y modismos de las marcas para comunicar sus novedades de temporada, casi que suplantan y por regla general complementan a un desfile.

María Cher, la firma fundada por la diseñadora María Chernajovky –que saltó de una minúscula tienda inicial en la calle Uriarte al circuito industrial y rankea entre las más instaladas, tiene una docena de locales– suele recurrir a ambos recursos con el arribo de una nueva temporada de moda.
Fue en la tienda de Palermo, situada en El Salvador 4724 y con interiorismo de madera y vistas a un jardín, donde a inicios de marzo presentó un nuevo corto de la saga + Mujeres para ilustrar guiños ornamentales de la colección de invierno.

Una banda de jazz en vivo con el músico Mariano Otero en el contrabajo y la coartada de desayuno para prensa precedieron a su presentación, mientras que un carrito de popcorn estacionado en la vereda anunciaba una inminente función. Pasando la banda, la barra y un pequeño escenario por donde desfilarían algunos de los atuendos que documenta el libro de estilo, en un pequeño microcine con butacas y auriculares de dj, se podía ver la campaña protagonizada por la modelo Milagros Schmoll. Ya con jeans pitillo, abrigo con estampas british, auriculares símil a los de la proyección, Milagros se desplazaba por el Paisaje Rivarola y lucía el “Saco Sabueso”, la camisa Fox, la calza símil pantalón y el imprescindible sombrero de fieltro negro con ala ancha que dictan las tendencias.

Acto seguido luciría el vestido corto en color nude con transparencias y canutillos apodado “Cigüeña” abrigado con tapado de piel ecológica al tono.

El loop –no había cortes entre uno y otro cambio de ropa– admitió además un abrigo de paño rojo y otro oscuro, de corte militar, matizado con camisa verde.

De modo complementario y con luz día, sobre las gradas contiguas a la barra se vieron fragmentos de la colección vasta en desarrollos y a cuyos ejes desde la firma calificaron de “Casual Seventies” (enteritos y pantalones palazzo, amplias camisas de seda, vestidos largos y sacos de corte masculino), “Lux Vintage” –rescates que emulan la estética vintage y coquetean con el lujo– de vestidos bordados con hilos de lúrex, a trajes de lentejuelas, detalles de guipiur en terminaciones y galones bordados con piedras y espejos.

Mientras que en el apartado “Leather & Fur” –cuero y piel– abundaron chaquetas de hombros pronunciados, la morfologías de la cazadora Perfecto ornamentadas con tachas y flecos. Acerca del apartado jeans, advierten que continúa el corte ultra-slim, y que a los cortes clásicos y las babuchas que predica la marca sumaron como rasgo innovador una gran profusión de lavados-nevados en tecnicolor, batiks y demás artilugios en clara apología de la estética de los años ’70 que parece regir la colección de Cher.
El slogan + Mujeres y las campañas protagonizadas con antelación por actrices y comunicadoras tienen su correlato en encuentros y acciones para las consumidoras y seguidoras de la marca, iniciados circa 2009 de las que en sus diversas ediciones ya participaron la filósofa Diana Maffia, la bailarina Inés Sanguinetti y la galerista Orly Benzacar, entre otras.

Vale remitirse a la web www.maria-cher.com.ar para apreciar el corto protagonizado por Schmoll, pero también para informarse acerca de la labor social que pregona la firma de la Fundación Paz a su participación en el proyecto “Cosiendo Redes”, ideado por Liliana Crigna, la madre de la diseñadora y que otorga capacitación en el oficio de la costura.